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Desde
Vietnam el Presidente Sebastián Piñera llamó
a buscar
soluciones para Aysén en base al diálogo
y la mantención del
orden público. |
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Un Fernando
González muy emocionado dijo adiós
a sus 13 años de exitosa carrera tenística
profesional,
el “bombardero”
no descartó la posibilidad de
ser capitán
de la Copa Davis. |
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Un hombre
fue condenado a no poder conducir
de por vida al ser sorprendido por tercera vez
manejando ebrio en Cañete. |
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Minvu abre
primera postulación a subsidios
de clase
media del año, este año se entregarán
39 mil
beneficios en todo Chile. |
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Con la
muerte del autor de la matanza de
Toulouse,
Mohamed Merah, culminó el
asalto policial a la residencia del
terrorista. |
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Rusia
amenaza con multar a Madonna si
defiende a
homosexuales en concierto, en San
Petersburgo rige Ley que prohíbe la
propaganda
homosexual.
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Dirigentes
ayseninos en La Moneda.
Luego
de más de tres horas de reuniones entre el Vicepresidente de la
República, Rodrigo Hinzpeter, y los representantes del Movimiento
Social de Aysén, se logró el acuerdo de terminar con la violencia y
las tomas de caminos y puentes, hoy, a las 11 de la mañana,
constituir las mesas de trabajo, con el Ministro
Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, que se
espera conduzcan a mejorar la calidad de vida de los ayseninos.
A
la salida de la cita hablaron el Vicepresidente Hinzpeter, el
Ministro Secretario General de Gobierno, Andrés Chadwick, y el
dirigente del Movimiento Social por Aysén, Iván Fuentes,
conversaron con la prensa manifestando optimismo en las negociaciones
que se iniciaran hoy y la confianza de que se haga innecesaria la
presencia de personal de Fuerzas Especiales de Carabineros con el
retorno de la paz a la zona.
Desde
Vietnam Piñera habla sobre Aysén.
Desde
Vietnam, en el marco de su gira por Asia, el Presidente Sebastián
Piñera reafirmó la “permanente disposición al dialogo y voluntad
de resolver los problemas, pero también, un firme compromiso con la
mantención del orden público y la paz ciudadana”, subrayando que
“en la medida en que esos principios se respeten, queremos avanzar
en resolver los problemas de las regiones extremas que se arrastran
desde hace décadas”.
Recordó
que “tres Ministros han estado en la Región y, adicionalmente, el
Plan Aysén está en plena marcha, incluyendo muchas de las
peticiones que hicieron los miembros de la mesa de Aysén”, por lo
que manifestó su deseo de avanzar en las soluciones de forma
progresiva. “Quiero decir responsablemente: no todas las
peticiones, por legítimas que sean, se pueden cumplir en forma
inmediata”.
Se
extravió avión ambulancia en Balmaceda.
Pocas
probabilidades de que haya podido realizar un aterrizaje de
emergencia el avión siniestrados, un Beechcraft BE 300,
matrícula CC-AEB, operado por la empresa aérea INAER Helicopter
Chile S.A., que se extravió ayer en la madrugada de Puerto Aguirre,
ve la FACH dada la conformación de la zona, la que se dijo es de
“faldeos bastante pronunciados. Hay muchas grietas y quebradas en
las que es bastante difícil poder aterrizar exitosamente”.
Alerta
amarilla por aumento de actividad del volcán Llaima.
La
Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) decretó Alerta Amarilla sobre
cinco comunas en la Región de la Araucanía, Cunco, Vilcún,
Curacautín, Lonquimay y Melipeuco, debido al incremento en la
actividad del volcán Llaima, luego que el Servicio Nacional de
Geología y Minería (Sernageomin) estableció que el macizo ha
experimentado un aumento paulatino de la sismicidad.
Murió
terrorista asesino en Francia.
Tras
horas de negociaciones infructuosas la policía francesa tomó por
asalto el departamento en que se encontraba atrincherado un
terrorista que mató a sangre fría a 7 personas, en el lugar hubo un
intenso tiroteo en el que Mohamed Merah, un francés de origen
argelino, terminó muriendo con un balazo en la cabeza.
Las
primeras versiones periodísticas, con claros afanes políticos,
intentaron culpar a un grupo neo nazi, con el paso de las horas se
supo, por declaraciones del sujeto, que estaba ligado a al Qaeda,
justificando su accionar en los niños palestinos, la presencia
militar francesa en Afganistán y la prohibición francesa al burka.
Ante
las evidencias de que el delincuente juvenil había evolucionado al
salafismo, que había viajado dos veces a Pakistán
y Afganistán, el sujeto se encontraba en la mira del Servicio
Nacional francés de Inteligencia, los que incluso le habían
interrogado, que desechó la peligrosidad de Merah.
La
candidato Presidencial del Frente Nacional, Marine Le Pen, sostuvo
que los asesinatos de Touluse y Montauban, al sur del territorio
francés, que dejaron 3 soldados, tres niños y un rabino
muertos, demuestran que Francia “subestimó peligrosamente la
amenaza del extremismo musulmán”.
Justicia
salarial argentina.
La
Presidente Cristina Fernández viuda de Kirchner, los Ministros y los
Parlamentarios argentinos han aumentados sus remuneraciones, en solo
dos años, en casi un 100%, los trabajadores del aparato público,
que supuestamente son protegidos por su Gobierno, en el mismo periodo
han tenido un reajuste de 50%.
Aborto
terapéutico: jaque a la espiritualidad nacional,
por
Sergio Melnick.
¿Qué
se juega realmente en esta ley, más allá de lo obvio?
Para
algunos es la libertad. Para otros, son temas de la mujer o la
defensa de la vida. Quizás es el rol del Estado. A veces también
son argumentos sociológicos, psicológicos o hasta la democracia.
Hay muchos puntos de vista. En cada uno existen planteamientos
interesantes en algún sentido. El debate es complejo y ciertamente
no debemos simplificarlo, menos caricaturizar.
Finalmente,
estas discusiones públicas concluyen en leyes, y por ende pasan
necesariamente por los actores políticos de cada país. Las leyes
son el órgano colectivo que define el bien y el mal en la sociedad
que opera en base al Estado de Derecho. Por eso, escuchando los
argumentos y leyendo entre líneas, esta discusión es un gran testeo
de poder entre el racionalismo y la influencia de la Iglesia Católica
en nuestro país. Para un influyente panelista de televisión, el ser
engendrado es sólo un pequeño ente de pocas células, no un ser
humano, y por ende puede ser eliminado a discreción. Para quienes
tenemos un poco de espiritualidad, ese es un ser humano desde que
ocurre el enorme misterio de la fecundación y se inicia una nueva
vida, que además es absolutamente única e irreproducible: un ser
único.
El
poder en la sociedad es un juego de suma cero; es decir, relativo.
Para que alguien logre mayor poder, necesariamente un otro alguien
debe perderlo.
Hace
100 años esta discusión simplemente no habría existido, como no
existía el tema de los preservativos, la situación de las personas
gay y otros dominios de la sociedad en que la Iglesia sí tenía
suficiente poder como para no permitirlos. En todos estos temas había
una doctrina religiosa y el poder suficiente para instalarla como
ley. En 40 años más habrá úteros artificiales, eso ya lo sabemos.
Obviamente
en el tema del aborto terapéutico el centro de todo es aceptar la
idea y la palabra formal «aborto», en una ley que es parte del
Estado de Derecho. Una definición más de bien y mal. Esto es simple
pero no trivial. Es una frontera a conquistar. Una lucha de poder que
por milenios ocurre entre titanes: la razón y la espiritualidad. La
razón (hoy emblematizada por la ciencia y la tecnología) trata de
organizar la realidad sólo en base a lo que la conciencia es capaz
de ver y entender. Pero el ser humano es mucho más complejo. Hay una
dimensión inconsciente más grande que la conciencia y de donde
nace, entre muchas otras cosas, un poderoso impulso hacia el tema de
la divinidad o la totalidad. Eso ha ocurrido y ocurre en todas las
sociedades, con diversas soluciones en cada caso. La izquierda ha
transformado su ideología en una religión estrictamente
racionalista en que el dios es el Estado y la fe en todas sus formas
está proscrita.
Es
muy difícil que personas con algún nivel espiritual real acepten la
idea de formalizar alguna forma de aborto, que es la terminación
consciente de una vida humana. En general, serán los racionalistas
puros, normalmente los más críticos de las iglesias, quienes
encontrarán los argumentos prácticos y populares para el aborto.
Pero
este tema involucra al misterio de la vida, un fenómeno que
realmente no entendemos, menos en su origen, donde aún combaten sin
tregua los creacionistas con los evolucionistas. Es decir,
espiritualidad vs. racionalidad.
En
esta ley en Chile, a mi entender, se juega el poder de la Iglesia y
la fuerza de la izquierda, siempre impulsora de este tipo de
iniciativas. La izquierda histórica ha tenido razón muchas veces y
en otras -las más- ciertamente se ha equivocado. Fue la izquierda la
que derrotó las monarquías; también ha patrocinado, y sigue
haciéndolo, feroces dictaduras. A su vez, la Iglesia, en su
historia, ha tenido momentos y líderes lamentables que ella misma
probablemente prefiere no recordar, y por ende tampoco es infalible.
Este
proyecto, en síntesis, tiene detrás de sí una lucha de poder cuyo
resultado es simbólicamente muy importante para nuestro futuro. En
un siglo en que predomina la racionalidad, la materialidad, y en que
mandan lo externo y lo trivial, una pérdida simbólica del poder de
la espiritualidad es delicada.
Creo
que a nuestra sociedad le falta gravemente la espiritualidad y esta
ley podría ser un retroceso más en ese sentido. Voto en contra.
Los
grandes temas del futuro
Por
Pablo Rodríguez Grez.
En
los últimos meses ha aumentado exponencialmente el uso de recursos
de fuerza para lograr toda suerte de objetivos (laborales,
estudiantiles, económicos, sociales, regionales, etcétera). Se ha
generalizado el estilo invasivo que comienza usurpando una propiedad,
o encadenándose a un inmueble, o agrediendo a la fuerza pública y
obstruyendo calles y carreteras a fin de paralizar los centros
urbanos. Desfiles y marchas con fines pacíficos en su origen
concluyen uniformemente en verdaderas batallas campales en que se
destruyen locales comerciales, vehículos, residencias de personas
ajenas a las manifestaciones y, por cierto, los bienes públicos que
sirven sin distinción a todos los chilenos.
La
necesidad de resguardar el orden público desplaza parte de las
fuerzas policiales al control de este tipo de estropicios, lo cual,
paralelamente, estimula la delincuencia en desmedro, principalmente,
de los sectores más débiles de la población.
Creo
que ha llegado la hora de poner freno a esta actividad que amenaza
desintegrar la convivencia pacífica con consecuencias que nadie
seriamente podría anticipar. Chile vivió una época de convulsión
y de violencia que tuvo origen en una extrema ideologización, cuando
el país, en medio de la "guerra fría", debió optar entre
la democracia y las experiencias totalitarias que entonces dominaban
gran parte del mundo. No fuimos los únicos que, en ese contexto
histórico, vieron estremecerse sus estructuras institucionales y
luego caer despedazadas. Lo propio ocurrió en casi todos los países
de este continente. Con muchas dificultades, desencuentros e
incomprensiones, nos empeñamos en restaurar el sistema político
democrático, lo que se logró respetando la voluntad popular, en una
jornada ejemplar que la historia juzgará objetivamente cuando se
hayan apagado las pasiones.
¿Entonces
qué nos ocurre en este momento? ¿Qué justifican el descontento y
la decepción?
Creo
que existen tres cuestiones de fondo que aún no toman forma
definida, pero que se irán perfilando en el futuro inmediato, todas
las cuales explican la desazón y el pesimismo que parecen reinar.
Primero,
hay un divorcio cada día más acentuado entre empresarios y
trabajadores, que se manifiesta, por el momento, en la demanda de
mayores salarios y en el repudio a la concentración del ingreso. En
consecuencia, debemos encontrar la fórmula para integrar la fuerza
laboral al modelo productivo y hacerla partícipe del proceso de
creación de la riqueza. Esta legítima aspiración puede
arrastrarnos al "populismo" y ser explotada por
inescrupulosos que buscan su provecho personal.
Segundo,
el sistema político no debe seguir monopolizado por los partidos. Es
cada día más urgente incorporar a las fuerzas sociales al ejercicio
de las potestades públicas, tanto más cuanto que los modernos
medios de convocatoria y movilización ciudadana se irán extendiendo
y perfeccionando hasta constituirse en un factor incontrolable.
Tercero,
es imperativo y urgente encarar el problema del centralismo porque
gran parte de nuestra población desaprovecha las enormes riquezas
naturales de que estamos dotados y desmejora su calidad de vida,
viviendo hacinada y maltrecha. Resulta profundamente injusto el
abandono en que se han mantenido las regiones, concentrando en
Santiago la inversión de la mayor parte de los recursos públicos.
Estos
son los grandes temas del futuro, los que deben enfocarse más allá
de derechas e izquierdas, con imaginación y creatividad. Los demás
(educación, vivienda, salud, seguridad), serán superados en la
medida en que corrijamos lo que es fundamental.
Muchos
chilenos miran con devota admiración a otras naciones. No faltan los
que piensan que el modelo económico y político debe seguir los
mismos lineamientos que los países anglosajones, íconos de una
supuesta superioridad. Olvidan que cada pueblo tiene su propia
idiosincrasia, que la "globalización" no se dará en un
marco de la uniformidad, sino en el de una rica diversidad. Todas las
experiencias copiadas del extranjero -las "leyes federales"
de Infante, la "comuna autónoma" de Irarrázabal, el
"parlamentarismo" practicado a partir del gobierno de Jorge
Montt Álvarez- han fracasado estrepitosamente entre nosotros. No es
extraño, porque Chile tiene una fisonomía y un alma propias. Lo que
señalamos explica por qué poco interesa la ideología ("el
relato") del Gobierno. Lo que sí debería interesarnos es
encarar los grandes desafíos del futuro, antes de que sea demasiado
tarde.
Grado
7,8 en México,
por
Roberto Ampuero.
De
pronto se abren las puertas de cuartos y muebles, y comienzan a
agitarse las cortinas. Es como si un ventarrón cruzase la residencia
de nuestra embajada en Ciudad de México, agitándolo todo. Me siento
mareado, no puedo sostenerme en pie. Lo atribuyo a que acabo de
llegar extenuado del aeropuerto, tras asistir en Chile al funeral de
mi querido padre. Pero no se trata de una corriente de aire ni de un
mareo, sino de un sismo que está azotando al centro de México. Con
7,8 grados, es el peor desde el terremoto de 1985. Lo que me
confundió es que se trató de un movimiento -¿cómo describirlo?-
vasto, circular y silencioso, sin ruido subterráneo.
Lo
primero que se pregunta después de un temblor fuerte alguien que
viene de país sísmico -como México o Chile- es dónde habrá sido
el terremoto. Sólo la zona metropolitana de la capital mexicana con
sus 78 municipios conurbados cuenta con 20 millones de personas, la
mayor concentración de habitantes de las Américas, la novena en el
mundo. En todo México viven alrededor de nueve mil chilenos. Cerca
de cinco mil 400 residen en las regiones que experimentaron este
martes el sismo. Logro comunicarme con nuestra embajada: el personal
está bien y tampoco hay daños materiales que lamentar.
Nuestro
personal está reunido en la calle. Siguiendo el protocolo para casos
de emergencia, nuestro edificio, como todos los de la ciudad, ha sido
evacuado en forma ordenada, y la gente se resguarda en puntos
predeterminados. Nuestras oficinas están en el piso 18 de un moderno
edificio, que bailó bien con el temblor, sembrando desde luego
inquietud entre sus moradores. Un funcionario de la agregaduría
agrícola quedó atrapado en el ascensor durante el sismo,
experiencia que califica de dramática, pero fue rescatado
rápidamente y puesto a buen recaudo.
Me
impresionan la madurez, calma y orden con que la ciudadanía
reaccionó ante el sismo. No debe olvidarse que la zona central de
México, especialmente su capital, fue azotada en 1985 por un
terremoto que cobró entre seis y 10 mil víctimas fatales, y
destruyó millares de construcciones. Mientras avanzo por las calles
atestadas, percibo una ciudad inquieta y alerta, que recupera la
calma. Los gobiernos central y local informan que no hay víctimas ni
daños materiales mayores. En ciertos puntos se registraron cortes de
suministro eléctrico, y, como es de suponer, las líneas telefónicas
sufrieron una sobrecarga porque millones deseaban averiguar el estado
en que se encontraban sus familiares o compartir su vivencia.
En
las esquinas se agrupa gente. Esperan a que pasen las réplicas para
volver a las oficinas. En kindergartens y escuelas quedó en
evidencia la utilidad de los simulacros de emergencia para estos
casos. Fluye información. El gobierno recomienda revisar e informar
sobre el estado de las construcciones. Llegan reportes sobre daños
en construcciones en el estado de Guerrero, donde fue el epicentro.
Pero pronto la vida recobra su ritmo normal. Mi agenda se mantiene:
mi reunión con la comisión de agricultura del Senado mexicano no se
cancela.
Y
desde Chile no cesan las consultas de los medios. Siento inquietud en
ellos y la opinión pública. Es como si el sismo hubiese tenido
lugar en Chile. Sabemos de terremotos, sufrimos uno devastador hace
poco y recibimos apoyo internacional para enfrentarlo. Por eso somos
solidarios. Pero también nos preocupa este sismo porque entre
mexicanos y chilenos se da una empatía natural. Pese a la intensidad
del sismo, las noticias tranquilizan: no hay muertos ni heridos.
México ha dado una lección de cómo un país con cultura sísmica
enfrenta emergencias como estas.
Una
carta que recuerda nuestra historia:
Señor
Director:
España
y Chile, doscientos años.
El
19 de marzo de 1812 se firmó la Constitución de Cádiz, famoso
documento jurídico que da comienzo a la España liberal, inicia el
constitucionalismo en la Península y abre un importante surco de
influencia para todo el mundo hispánico. En estos días se
conmemoran en Cádiz -en la que participará Chile a través de la
Embajada- los 200 años de "la Pepa", como se le llama a
esa Carta Fundamental.
Para
Chile también fue un año crucial. En febrero comenzó a circular la
Aurora de Chile, el primer periódico nacional, gran difusor de las
ideas de la libertad y de los nuevos conceptos políticos que
comenzarían a dominar en el país. En un editorial de mayo destacaba
"que la formación de una Constitución es la obra maestra de
los grandes genios: que exige una filosofía profunda, una consumada
prudencia, y vastos conocimientos de la historia".
Chile
no adoptó la Carta de Cádiz como propia, pero participó a través
de sus dos representantes en las Cortes que debatían la Constitución
en la Península y el nuevo orden político. Ellos eran Joaquín
Fernández de Leyva (1779-1814) y Miguel Riesco y Puente (1783-1858),
quienes tuvieron posturas propias en los debates y lograron ilustrar
con sus conocimientos en temas como la representación política.
La
razón de fondo es que Chile tuvo su propia Carta Fundamental en el
año de Cádiz: fue el Reglamento Constitucional Provisorio de 1812,
suscrito por cientos de ciudadanos. Lo anterior era en parte
consecuencia de que el héroe nacional José Miguel Carrera había
conocido de primera fuente los debates gaditanos, y había trasladado
a Chile esos deseos de libertad. En el Reglamento se establecía que
el Rey era Fernando VII, quien aceptaría esta Constitución, a cuyo
nombre regiría una Junta Superior Gubernativa. Más adelante
precisaba que "ningún decreto, providencia u orden, que emane
de cualquiera autoridad o tribunales de fuera del territorio de
Chile, tendrá efecto alguno; y los que intentaren darles valor,
serán castigados como reos de Estado". Era, en la práctica,
una declaración de independencia.
Así
lo señaló claramente la Aurora de Chile en noviembre: "nosotros
también vamos a tener nuestras Cortes en el Congreso Chileno,
tenemos ya nuestra Regencia en la Junta, no necesitamos de pasar
anchos mares para buscar la feliz Constitución y los destinos que
aquí nos daremos con mejor conocimiento del mérito, y de las
circunstancias que están presentes a nuestra vista, y mientras se
prepara la representación legítima de nuestros pueblos, Fernando
será nuestro Rey hasta que aquella fije nuestra suerte. Confesemos
pues que podemos, y debemos gobernarnos por nosotros mismos".
Este
2012 se cumplen doscientos años, de Constitución de Cádiz y del
Reglamento Constitucional. Hoy España y Chile son dos países
hermanos, que comparten muchos aspectos de su historia y que, sobre
todo, tienen un gran porvenir, basado en la integración, en el
respeto mutuo y en la valoración de las inmensas posibilidades que
cada país le ofrece al otro.
Bien
por la historia, mejor por el futuro.
Sergio
Romero Pizarro, Embajador de Chile en España.
Situación
curiosa:
Nos
parece curioso, por decir lo menos, que Carabineros sean sancionados
por cumplir con su deber Constitucional de defender a la población
de Aysén, que mayoritariamente no han participado en los actos de
violencia y a los que se ha impedido el libre abastecimiento de
productos esenciales y se les ha coartado la libertar de transito,
mientras se ensalza a los violentistas y a aquellos que quieren
imponer condiciones, que implican poner al Gobierno de rodillas, para
solucionar un conflicto que es evidente tiene peticiones
justificadas.
Nos
parece irracional que se pretenda que los actuales ocupantes del
Palacio de La Moneda solucionen de inmediato problemas que se
arrastran por los últimos 20 años, en los que los que dirigen el
“Movimiento Social” permanecieron sospechosamente silentes
durante las cuatro Administraciones de la concertación, lo que sin
duda alguna les transforma en cómplices de los sufrimientos de ese
pueblo que además de bregar con las dificultades climáticas deben
lidiar diariamente con precios muy superiores a los del resto del
país.
Aunque
los reclamos populares de Aysén son legítimos, y seguramente
compartidos por todas las zonas extremas del país, es necesario
despertar y darse cuenta que en estas movilizaciones, en especial en
el uso de la violencia, están manipuladas por el siniestro partido
comunista, y por cierto de muchos “tontos útiles”, con los que
están asociados, a los que no les interesa solucionar el drama que
viven los ayseninos, a ellos solo les compete, solo buscan obtener
lucro político de las dificultades que viven nuestros compatriotas
de esas latitudes.
